Yo quería ir al baño pero como en unos minutos tenía que encontrarme con mi papá en una iglesia cerca de la Av. Abancay decidí aguantarme, digo ¿quién no se ha aguantado nunca de ir al baño?. Sonó el timbre de salida y cuando buscaba a mi mejor amigo para irnos juntos justo este había decidido irse con su prometedora y recién confirmada enamorada, ¿si ella sabía que estaba saliendo con un gay? pues creo que recién se enteraría 5 meses más tarde.
Salí con paso apurado hacia la vereda y volvía a sentir mi pierna un poco débil como la anterior vez durante el viaje de promoción. No le presté atención y mientras caminaba agarraba con una mano mi chompa y con la otra me iba sacando la corbata. Unos metros más adelante se me une un compañero de clase que apellidaba "Bamberán", era enorme ese chico, creo que pesaba como 100 kilos y medía 1.72 m. No éramos muy amigos pero nos conocíamos lo suficiente como para acompañarnos hasta Abancay y conversar de forma amena sobre algunas cosas.
Ya estábamos a mitad de camino cuando de repente una electricidad inusual comienza a irradiar intensamente desde mi columna hacia mi cadera, mis piernas se debilitan y mis ganas de ir al baño aumentaron de sobremanera. No lo entendía, no había comido nada en mal estado, no estaba con el estómago flojo ni tenía el retortijón característico pero cada vez que daba un paso sentía que la gravedad hacía su trabajo, mi fisiología se revelaba contra mí y mi voluntad ya no era suficiente. Comencé a sudar frío y desconcertado por lo que pasaba en mi cuerpo y peor al aún estar a 10 cuadras de la Av. Abancay, Bambarén me pregunta: "¿Oye no hueles algo raro?". Mi cara de menso solo atinó a transformarse y más fresco que una lechuga dije: "Ah, sí, sí, es que están arreglando las tuberías por aquí tss estos que nunca terminan". Y justo cuando lo inevitable estaba abriéndose camino y caminar ya no era una opción mi rechoncho compañero se voltea y me dice: "¡Estas calles apestan a mierda! yo doblo aquí, nos vemos el lunes, chau". A lo que respondí asintiendo descaradamente y con un casi inaudible pero muy agradecido "chauuu..." mientras se alejaba. Ni bien se fue irrumpí en un restaurante de la esquina "PERMISO, PERDÓN, DISCULPE, PERMISO" me abrí paso entre las mesas empujando a todos con mi mochila. "¡¿EY ADONDE VAS?!" me gritó el mesero pero ni caso le presté. Entré al baño, cerré con seguro y cuando decido sentarme finalmente me doy cuenta que ya era demasiado tarde. Solo exclamé un atónito y poético... "Me cagué".
No podía creerlo, ¿qué me estaba pasando? ¿por qué no pude evitarlo?, muchas preguntas me envolvían la mente pero en ese momento solo recordé que mi mamá siempre decía que uno era más grande que sus problemas, así que decidí dejar de buscar la causa y me puse a pensar en soluciones. "¡Papel!". No había en aquel baño, así que abrí mi mochila y comencé a sacar cada prueba pasada que encontraba. "Algo que no me sirva, algo que no me sirva..." pensaba y la agenda de colegio al fin tuvo un uso en esta vida, hoja por hoja de asistencia y oraciones iban limpiando y santificando no solo mi piel sino parte de mi ropa, sí, era un desastre, pero en plena catástrofe no pude evitar soltar una carcajada al darme cuenta de que ahora yo literalmente "me estaba pasando por el culo el himno del colegio".
Ya menos sucio, seguro de que no había nada más por sorprender y después de haber dejado de recuerdo mi ropa interior en el baño de aquel restaurante salí del local y fui a la Iglesia a encontrarme con mi papá. Lo vi, me saludó y le dije que tenía que ir casa. No preguntó, solo me miró y tomamos el taxi. Llegué, subí corriendo por las escaleras, me bañé, y después de pensar en lo que había sucedido bajé a encontrarme con mis papás y mis hermanos que estaban en la sala y les dije "Algo no está bien conmigo" y les conté lo que había sucedido.
La cara desencajada de la psicóloga y la boquiabierta de su asistente demoraron en reaccionar unos segundos y después de verse los rostros la Dra. Castillo me dijo:
"Me has hecho... jovencito me has hecho sentir como si me hubiera pasado todo eso a mí... dime ¿y no te pone triste el recordar todo esto?¿no lloraste? digo, hasta te has reído mientras lo contabas".
Es que en ese momento no pensaba en lo "triste" de la situación, sino quería "salir" de la situación y el llorar solo iba a empeorar las cosas. Tenía 16 años, a cualquiera le asusta y claro que luego en mi casa me puse triste pero no salió tan mal, al menos Bamberán nunca se enteró y encontré un baño a la mano. Además después de eso volví a la clínica para hacerme más análisis y al decirle al doc lo que me había pasado las otras pruebas confirmaron mi lesión medular, osea al menos sirvió de algo. Ya tengo 18 años y como que ya es una anécdota más.
"Estoy sorprendida, uy se nos acabó el tiempo, nos vemos la próxima semana ¿creo que te toca gimnasio a esta hora?"
"Sí, ya voy para allá, hasta luego doctora, nos vemos Karina."
Eran las 11am y salí del consultorio de psicología, ahora me tocaba terapia en el gimnasio, a la 1 el almuerzo y a las 4pm terapia física individual, pero antes... mejor me voy al baño.
Que buena experiencia, la manera de contarlo, cualquier otro se hubiera avergonzado y reprochado por qué le tenía que pasar estas cosas a él habiendo cantidad de alumnos en el mismo salón u otroa colegios.
ResponderEliminarSaliste airoso y te pasaste por el culo la agenda escolar, una manera gloriosa de terminar la secundaria. Tienes mucha razón, así como dice Murakami: sentir dolor es inevitable, sufrir opcional.
Buen día :)
"sentir dolor es inevitable, sufrir opcional" será mi filosofía de vida :) Un abrazo!
EliminarJajajaja... Yo tengo una experiencia similar, que aun me trauma y me causa mucha verguenza, aunque fue cuando tenia 7 años...
ResponderEliminarYa te darás cuenta que en este blog lo que menos importa es la vergüenza XD así que cuenta nomás jajaja abrazos!
EliminarJajjaja pobre de ti Munani, felismente no he ha pasado.
ResponderEliminarSaludos.!
Nunca digas nunca jajaja pues, tienes razón, felizmente. Saludos!
EliminarSiento mucho lo que debiste pasar, pero sinceramente, me has hecho reir un montón. Todos nos han pasado cosas por el estilo, pero lo has contado sublime. Un abrazo
ResponderEliminarOh muchas gracias, siempre es lindo arrancar sonrisas.
EliminarAy por Dios! jajajajajaja
ResponderEliminarMe has hecho reír demasiado!!! Y sabes qué, transmites todo lo que sentiste! Como dijo tu psico, nos has hecho sentir como si nos hubiera pasado a nosotros! Qué dolor de estómago! Jajajajajaj
Un beso grande!
Sí, hasta acá se siente XD beshitos!
EliminarJajajajajaja me encanta como cuentas todo con sentido del humor, yo me hubiera puesto todo nervioso y no sabría qué hacer jajajajaja.
ResponderEliminarCon humor todo es más fácil :)
EliminarVaya debió ser frustrante! Recuerdo que a una chica le paso eso en 2do año, la pobre se cambio de colegio porque la fastidiaban mucho, fue terrible para ella. Debió ser un momento muy malo, uno no está ajeno a este tipo de accidentes. Yo por eso siempre salgo con Ph en el bolsillo izquierdo del pantalón (de pasada que disimulo mi falta de nalga! Jajajaja). Espero que las cosas mejoren contigo! Un abrazote inmenso! De esos que rompen costillas!
ResponderEliminarSí, a un compañerito en 4to de primaria le pasó lo mismo pero solo me di cuenta yo porque me quedé hasta el último en el salón. Su secreto sigue guardadito ^^
Eliminarque fuerte!! pero bueno, ante esas circunstancias supiste ponerle solucion apesar de todo. eso es ser practico y no mamadas, jaja. te deseo lo mejor chamaquito chulo, besitos cariñosotes de tigrotototes
ResponderEliminarexacto, no hay tiempo para mamadas.... eso en la noche jajaja Un beshote Tigris cuericiformis :)
Eliminarjajajjajaa exxxacto solo en las noches :D
Eliminaroye te deje un premio :d con todo cariño, sabes que yote estimo mucho niño
besotes
No pude evitar reírme con lo del himno del colegio.
ResponderEliminarVaya que experiencia! Me imagino a tu psicóloga cuando le contaste esto.
Pero es que en la vida pasan tantas y tantas cosas que literal se nos van de las manos.
Un abrazo muchacho.
Si hasta yo me reí en ese momento! XD pues sí, cosas que no puedes controlar. Saludos!
EliminarMe encantó tu actitud, a pesar de lo incomodísimo de la situación, pudiste ver que al menos tenías un baño, tu amigo no se dio cuenta, cosa que a esa edad es vital, y si bien no había ph, tenías tu mochila llena de papeles que pudieran ser de utilidad. Esa es la actitud, encontrar los PROs en las peores CONTRAs de la vida, siempre hay algo que agradecer, siempre, ser capaz de notar esos detalles aunque sean pequeñitos, es la mejor manera de ser felices.
ResponderEliminarUn besote enorme Munanito peshosho!!! <3
En esos momentos como que se activa el cerebro, la adrenalina sale de las suprarrenales y nos pone atentos hasta al más mínimo detalle, como ese himno que nadie cantaba :p Beshotes miMina
Eliminarjajaja todos alguna vez hemos pasado por eso, chiquitos o mas grandes igual a todos nos toca.
ResponderEliminarTe dejo un post de algo similar que publiqué hace mucho:
http://eduardounalm.blogspot.com/2011/09/por-el-amor-de-una-mujer-ii.html
A ver unas cosquillitas... jajaja muy divertido ^^ ves que lindo es alegrar a la gente con las desgracias de uno XD
EliminarHasta me pareció oler caca mientras leía tu entrada! Muy buena la manera en que redactas y también la forma en que afrontaste el problema. Eres fuerte :)
ResponderEliminarSaludos!
jajaja ayyy no te pases ya, es olor a rosas. Gracias Edch, saludos.
EliminarWao, fue literalmente "la cagada" xD Cuentas muy bien las cosas, hasta me pareció ver la escena ._. felizmente ya terminé de comer mi pan con queso xD
ResponderEliminarEn mi caso no he tenido roches de ese tipo, aunque sí vomité una vez en el colegio y fue tan rochoso (en mi desesperación salí caminando rápido del salón y mientras caminaba iba vomitando) que después de varios años aún me lo recordaban. Pero recuerdo que en 1ero de primaria había un chico, Adolfo, que una vez se cagó en el pantalón en pleno salón. Parece que tenía algún problema psicológico.
Con tu manera de contar la historia lograste incluso hacer sentir mal a la psicóloga, no sé si eso sea extraño o usual, pero al menos mis profesores siempre nos machacan que debemos ser casi inexpresivos para que el paciente no nos note afectados y no se inhiba o exceda.
Saludos.
La psicóloga estaba sorprendida pero siempre guardando la compostura y su practicante, Karina, pues se quedó boquiabierta XD
EliminarBuena entrada, es ya normal eso. Creo que me oriné una vez, puesa gana y punto. Pero lo bueno que tu amigo grandote como Gary Okno no se dio cuenta si no contaba a todos jajaja. Hay cosas peores como dices (como por ejemplo hacer tesis para que seas bachiller bah! ni grado es eso. Para mi normal hacer tesis pero para bachiller? no me convence) pero hay que afrontarlas.
ResponderEliminar¿te orinaste? yala jajaja pues pasa y punto, ni vuelta que darle. Yo pensé que la tesis era para titularse, de esos temas no estoy muy al tanto, vamos con la tesis! :)
EliminarHaber sido de los que comían 'Cuates' mezclado con 'Casino' en el recreo y no ir al baño por nada del mundo por unos cuantos años fue entrenamiento suficiente para aguantarme bastante bien. Nada se escapa. Puedo aguantar horas, eso sí me retuerzo y sudo frío xD
ResponderEliminarEn vez de papeles bond, que raspan mucho, yo usé una vez mi media :) era suavecita, ahora que me acuerdo xD
las cosas que ya van soltando jajaja bueno entonces creo que medias es un buen regalo para Navidad XD un abrazo!
EliminarJajajajajajajaja Como me he reído...Sobre todo por la forma que lo cuentas...Tremenda historia,,!! jajajajaja Me quedo por aca...te invito a que me visites y te quedes..aunque mi blog es un poquito mas romantico..!! jajajajaja Un calido saludo.
ResponderEliminarMe alegra que te hayas divertido :) Saludos!
Eliminarsiempre ubico por donde voy, donde hay baños públicos, no me gusta usarlos, pero a veces es necesario.
ResponderEliminarY saber exactamente donde hay uno es básico por lo menos si uno anda en la calle mucho tiempo.
Gay precavido vale por dos ;)
EliminarHay cosas que no le envidio a nadie, no he tenido la mala suerte de hacerme pero si de mearme, no es igual, pero si me ha pasado y es horrible.
ResponderEliminarOhh sí, varios han pasado por eso :/
EliminarEres grande cari... aunque no te visito tanto, me encanta tu blog, me recordaste dos penosas situaciones que viví....
ResponderEliminarEn el momento es una gran tragedia, pero luego es de risa, yo creo que a todos nos a pasado, pero pocos lo cuentan así, con ese desparpajo y gracia
Se agradece ^^
EliminarBuen post, hahaha saludos Munani!
ResponderEliminarShaludos!
EliminarMe gusta tu blog un saludo fuerte!!!
ResponderEliminarQué bueno :) saludos para ti también
EliminarEres la muerte (casi digo algo que aludía al título) jajajajajaajajajajajajajajjaaja qué cosas!!
ResponderEliminarSin embargo sólo me reiría de haber sido un accidente sin mayor trascendencia, pero en este caso, ello dio pie a un diagnóstico nada agradable.
Pero como dice tu mamá, "uno es más grande que los problemas" :) así que a las terapias y a ponerle punche no más para que nada te impida lograr todo lo que quieras (Y) :D
Saludotes!
Soy la hahada XD
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